jueves, marzo 30, 2006

Tres



Tres eran los mosqueteros.

Aramis. Divertido y pasional, el primero de los mosqueteros. Loco, salvaje, incontrolable. Un auténtico dechado de problemas, aunque siempre sale adelante. Valiente, atrevido, el más joven. Es un símbolo y es el primero.

Porthos. Descarado, pero bonachón y tranquilo, el segundo de los mosqueteros. De fiar es una expresión que lo define, pero no se corta de hacer lo que siente y decir lo que piensa. Es un símbolo y es el segundo.

Athos. Orgulloso, tranquilo, una apología de la perfección, excepto por lo que le envuelve, el tercero de los mosqueteros. Acosado por sus problemas, sí, pero siempre firme, siempre un apoyo. Es un símbolo y es el tercero.

Gracias por estos tres años.

sábado, marzo 11, 2006

Errores

Hoy tengo que dar las gracias.

De un tiempo a esta parte he cambiado, las decepciones me han golpeado y yo, queriendo salvar al mago de mi interior, casi lo mato con el peso de las armaduras. El orgullo y la cerrazón que siempre he mantenido lejos me ayudaron a sortear los golpes, fueron un muro, pero casi me cuesta perderme a mí mismo para siempre. Y ahora ya no quiero más esos muros.

La poca seguridad en mí mismo ha sido siempre mi mayor característica, es lo que me convierte en el mago, lo que me dicta quién soy. Nunca he sido un sabio, lo que soy no es más que un buscador de sabiduría. Y eso es lo que mis muros me habían hecho olvidar.

Había perdido la fe y he de recuperarla. Había dejado de creer en el ser humano, solo yo era completamente fiable. Pero alguien me dijo: “prefiero vivir y equivocarme a estar muerto y no poder acertar”. Nunca podré agradecer lo bastante estas palabras.

Hay gente que merece mi confianza, algunos porque jamás me han engañado pidiéndomela (sabéis quiénes sois), otros porque, en realidad, no tengo derecho a dudar de ellos (también sabéis quiénes sois).

Por eso doy las gracias. Porque, en los peores tiempos de este aprendiz de mago, cuando menos me parecía a mí mismo, cuando más cerca he estado de renunciar a la magia, me habéis aguantado y me habéis hecho entender que me había perdido.

Gracias por hacerme volver al camino cuando ni siquiera me había dado cuenta de que me había salido.

Espero que, algún día, pueda volver a ganar lo que, con justicia, he perdido con vosotros. Espero volver a dialogar con vosotros, no solo discutir.

viernes, marzo 03, 2006

Él

Tuve un sueño.
Soñé un gran árbol, muchas ramas,
en cada rama mil pequeños jilgueros,
en las ramas más débiles, los pajarillos más ligeros,
el tronco estaba siempre visible incluso para los de más lejos.

Tuve un sueño.
Soñé un cielo cuajado de estrellas,
en el centro brillaban las más bellas
apoyando las demás con su más bella luz
para crear así más luz con ellas.

Tuve un sueño.
Un hombre amable en una montaña solitaria,
maestro de reyes, rey de sabios, sabio en magia,
creador de belleza, conocedor de ciencias varias,
organizador de jilgueros y de estrellas, apaciguador de almas.

¿Ha sido un sueño?
Ojalá no haya sido un sueño.

jueves, marzo 02, 2006

Demostración Matemática del Cuento de Caperucita Roja

Tras una concienzuda búsqueda en bibliotecas públicas y eclesiásticas, he aquí una joya que encontré escondido entre los libros prohibidos de la iglesia de Mazón de las Matas, a los que accedí a hurtadillas mientras el párroco se pimplaba una botella de Beefeater. He de decir que la búsqueda no ha sido nada fácil, pues he seguido el rastro de este texto, escrito en 1732, a través de los registros de 3 continentes, pero ha valido la pena.

Sin más paso a presentar el texto, en el que el autor, un francés afincado en Matalaperra de los Infantes nos cuenta, con todo lujo de detalle, la historia de Caperucita Roja. Esto no tendría nada de especial si no fuera porque la historia que cuenta es la de los hermanos Grimm, nacidos 50 años más tarde, no la antigua leyenda, y la cuenta en un lenguaje claro y preciso, mucho más inteligible que el de estos, que por no ser no eran ni españoles ni nada (el otro tampoco, pero era bajito y gilipollas, así que era español por adopción).

Con este texto queda demostrado que los Grimm, por otra parte grandes conocedores de las matemáticas, no adaptaron nada, se limitaron a traducir.

Antes de ofrecer el texto aclararé la notación, dado que forzosamente han de aparecer signos en el texto que no aparecen en las fuentes disponibles: [e] es “pertenece a”, [IR] es “cuerpo de los reales”, [A] es “para todo”, [E] es “existe”, [c] es “contenido”, [^] es “intersección”, [/c/] es “no contenido”.

A continuación paso a ofrecer una traducción fiel del texto íntegro (en polaco en el original [y con subtítulos también en polaco]):

Hace x años siendo x un número finito desconocido pero constante, x[e][IR],, [A]y[e][IR] x>y o x=y, [E]! c del conjunto N={niñas del mundo/edad<8 c="{caperuza" s="caperuza" d="día," f="d+h,,"> c toma vector “casita” -> “casita de a” siendo a[e]{abuelas de c}. Cuando h>1/2 => c[c]“casita de a” hasta h>1, si h>1 c toma vector “casita de a” -> “casita”. Este teorema es aplicable [A]h>0 y c={caperuza roja, ropa, niña}=c(1)={caperuza roja, ropa, niña, cestita} mientras h[e](0,1/2).

Entonces c<(casita de a-pueblo)/2 => limf(c)=c, c>(casita de a-pueblo)/2 => limf(c)=c, c=(casita de a-pueblo)/2 => limf(c)=l, siendo l=incógnita con pelo.

Aplicamos L´Hopital para dar un rodeo => l -> casita de a, c -> casita de a, c/l>1.

Tomamos l[/c/]{casita de a} => l+p=a-p (siendo p el elemento puerta de {casita de a}) => l[c]{casita de a} y a[c]l={elementos lobo}. Corolario: “ropa de a”[e]l={elementos lobo} (dato adicional [a probar como ejercicio]:¿l[e]{machos}?¿l[e]{hembras}?).

Considerando c[e]casita de a tomamos f:I(c) -> l, siendo I(c)={Ideas felices de c},, f(ojos) -> OJOS, f(dientes) -> DIENTES,…, f(i) -> I [A]i[e]I(c), siendo I[e]l, i c[e]l (¿f(c)=C? Considerar).

Teorema: Si vector posición de C´.E´.C´´=vector posición de l => l=0 (Siendo C´={cazadores sádicos}, E´={escopetas cargadas}, C´´={cuchillos afilados}).

Demostración:
Lema 1: E´+l= jodienda (evidente)
Lema 2: F(C´´)>F(l), siendo F(i)=filo de i.
Por reducción al absurdo: si F(C´´) Mundo[e]{l(i)}, i[e]I(i), siendo I(i) conjunto de índices y l(i) lobo cualquiera. ABSURDO => F(C´´)>F(l).

Aplicando Lema 1 y Lema 2 sobre l => l=0.

Además, como corolario: l=c+a+“vida de l”+“cariño a l por parte de C´”. Siendo l=0, vida de l=0 => c+a+“cariño de a por parte de C´”=0 => c+a=2, pues “cariño a l por parte de C´”=-muchísimo.

Bueno, ¿os ha gustado? Pues aquí va un avance de mi próximo ensayo: “Pi” es muy romántico, un poeta, “e” es perfeccionista, ha estudiado ingeniería, “i” es más moderno, peazo punkarra (cuando los punkis nos vamos de marchaaaaa, no te enamores, tonta del habaaaaaaa).