miércoles, junio 29, 2005

Cosas Que Importan

He pensado mucho en esto. Este pensamiento me devora por dentro y deja mi cerebro seco como una pasa. Porque no me atrevo a pensarlo.

Pero la pregunta sigue ahí, y la respuesta... la respuesta se que está al alcance de la mano, pero no logro alcanzarla. Solo puedo lanzar hipótesis, desde lejos.

¿Qué es lo que nos proporciona identidad? ¿Qué es lo que hace que seamos nosotros? Decimos que un animal, una planta, un ser humano, es uno. ¿Qué diferencia hay entre estas relaciones y las que se tienen asimilando el concepto de grupo? ¿Porqué un lobo es uno a pesar de estar compuesto de muchas células, pero una manada son muchos lobos como entidades independientes?

Esta reflexión lleva a un curso de pensamiento muy extraño: la idea de definición de identidad es subjetiva, creada y no relacionada con la naturaleza real de las cosas, con la existencia real. Es, por decirlo así, un objeto mucho más real que la realidad en sí, solo encontrable en el mundo de las ideas platónico, pero perfecto y único y, por tanto, sin existencia.

Lo cual nos lleva a conclusiones inaceptables, como la no existencia del ser humano, ni siquiera del ser vivo, pues no son más que "situaciones relativas" de partículas, generalidades de rasgos comunes solo catalogables fuera del ámbito natural.

Puesto que esta situación, esta comprensión, no lleva a ningún sitio excepto al determinismo científico, y puesto que esta consideración, si fuera verdadera, no supone nada (pues nos dice que todo es nada, luego ella misma lo es) excepto una rotura irreparable en nosotros mismos, tomaremos el camino de pensamiento complementario. La identidad sí existe.

Esto solo prueba que tenemos la necesidad de pensar que existe, pero no prueba su existencia. Es un auténtico rompecabezas.

5 comentarios:

Artemisa dijo...

"Esto solo prueba que tenemos la necesidad de pensar que existe, pero no prueba su existencia. Es un auténtico rompecabezas".

Yo creo que aceptando que tenemos la necesidad de pensar que la identidad existe, aunque realmente no existe, hacemos que exista al pensar en ella. Tampoco existirían la libertad, la traición o el amor si nosotros no pensáramos en ello. (Creo que Platón dijo algo parecido con su Teoría de las Ideas, no estoy segura).

Artemisa dijo...

P.D: Ahora que lo pienso, lo de existir no está muy claro. Decidimos que algo existe cuando lo podemos tocar o sentir de alguna forma, pero después de leer "La vida es sueño" la madeja de la existencia se complica...

Tú también, menudas comeduras de cabeza que tienes a estas horitas. xD Yo he encendido el ordenador para escribir y así una no se concentra, hombre.

Artemisa dijo...

Oye, macho, ¿esto cuándo lo vas a actualizar? :p

Anónimo dijo...

La identidad. ¿Somos lo que somos o lo que somos nos hace ser como somos?
No es una pregunta fácil, pero tampoco es imposible. Desde luego es complicada.

Nuestra identidad, según creo yo, no la define nuestra genética, aunque en parte lo hace, no la define nuestro entorno, aunque tambien influye y bastante. Lo que define nuestra identidad son las decisiones.

Si consideramos la linea del tiempo como una linea unidimensional y de una sola direccion (sí, esto ya lo hemos discutido Elener, pero aún no hemos terminado) en ese caso, no hay realidad paralelas. Pero si la consideramos como algo bidimensional o n-dimensional, entonces nuestras decisiones pueden cambiar nuestro camino por este viaje, nuestras decisiones pueden cambiar la direccion de la linea del tiempo por la que discurriamos y con ella nuestra identidad.

Que liada, ¿no? A que viene este hablandonos de todo esto. Pues porque son las decisiones quienes nos dan la identidad.

Cierra los ojos y piensa que no existe la materia ( ¬¬ Es una forma de hablar, si los cierras no puedes seguir leyendo). Que todos somos energia con conciencia y movilidad viajando en el tiempo y el espacio al igual que lo hacemos ahora ¿seguirías teniendo una identidad? Una parecida, diferente porque tu genética no te ha influido. Piensa ahora que no eres materia, piensa que eres una parte de la nada con conciencia y movilidad viajando igualmente. Sigues pensando, sigues teniendo identidad, puede que hasta parecida si tu identidad no depende demasiado de factores geneticos o del entorno.

Bueno pues ese eres tu. Un ser que piensa y que toma decisiones. Mientras tomes las mismas decisiones da igual que seas alto o bajo, rubio o moreno, blanco o negro. Mantienes tu identidad. Haces la misma carrera, provocas las mismas sensaciones a tus amigos. Tendras los mismos gustos, elegirás en base a los mismos valores. Eres tu.
Incluso aunque estuvieras en otra linea temporal, viviendo en la Edad Media o en una Europa gobernada por los nazis, seguirias siendo Elener si tuvieras las mismas ideas y quisieras tomar las mismas decisiones que ahora tomarias. Y para mi seguirías siendo el mismo Elener en quien confiar con la misma identidad que te ha llevado a tomar las decisiones que te han llevado a transformar tu identidad en lo que es ahora.
Serias Elener porque te parecerias a Elener en todo. Incluso si estuviera en Australia y alguien que no comparta tus recuerdos se comportara como tú me recordaría inevitablemente a tí. Vamos, que le hacen la estética y le cambian la voz y te suplanta sin que nadie se de cuenta. No nos extrañaria que se comporte como tu ni que coma lo mismo que tu ni que estudie lo mismo que tu ni que se aplique igual que tu. Ni tampoco nos extrañaria que salga con nosotros. (Ten cuidado, me han dicho que hay un tipo por Australia que intenta suplantarte!!) AAAHH (gritos)

Por tanto, para mi la identidad viene dada por un conjunto de decisiones que desencadenan en otras decisiones y que van dandote experiencia, experiencia que te obliga a tomar posturas respecto a determinados aspectos (a veces influenciado por la genética a veces por el entorno) y que terminan forjando una identidad y unos valores. Una identidad que bien estudiada puede predecir tu siguiente paso en base a esos valores (si la genética o el entorno no influyeran).

Espero que se haya entendido (visitad mi web, aunque ahora anda caida)

Anónimo dijo...

Si presupongo que puedo cerrar los ojos y no conformarme de materia o admito que la consciencia está ligada al átomo (¿Cómo cerrar mis ojos si no?) o que soy una suerte de eterealidad consciente imaginando existencias banales y siendo un poco gilipollas. En cualquier caso, el yo se suele definir en función a los diversos internos y externos al ente pensante.
Si te interesa, mi "tú" para tí no es sino un "te".